La Universidad Siglo 21 admite estudiantes de toda raza, color, sexo, orientación sexual, religión, nacionalidad, ideología, capacidad física, edad, situación económica; y no admite discriminación alguna.
La única forma de selección que justifica es la que resulta de elegir a los y las mejores aspirantes sobre la base de sus merecimientos académicos y actitudes morales; y, basándose en los mismos valores, a los y las mejores docentes e investigadores.
De acuerdo con su Estatuto, la finalidad esencial y específica de la Universidad Siglo 21 es:
Formar líderes emprendedores que contribuyan a aumentar la eficiencia y competitividad de las organizaciones públicas y privadas donde se desempeñen. Líderes capaces de asumir posiciones de responsabilidad en la creación y distribución de la riqueza, con la aspiración última de que la región sea cada vez más desarrollada, ética, solidaria y equitativa.
Desarrollar alternativas para lograr un acceso masivo a la educación superior, manteniendo elevados niveles de excelencia.
Resolver, a través de institutos, programas y proyectos de investigación los problemas que la región le demande a la Universidad.
La Universidad Siglo 21 es no confesional, admite estudiantes de todo tipo de creencia religiosa.
La Universidad Siglo 21 concibe al sistema democrático de gobierno en la sociedad como el más adecuado al desarrollo de los pueblos y al resguardo de las libertades individuales y los derechos humanos. En tal convicción, no admite en sus aulas ni en su personal ideologías fundamentalistas o terroristas que atenten contra el orden institucional mediante métodos antidemocráticos.
La Universidad Siglo 21 concibe su misión independiente de la coyuntura o de la realidad circunstancial del presente. Proyecta su función en el largo plazo trascendiendo los límites generacionales de sus fundadores y de sus autoridades ocasionales.